Creacion de la variedad Syrup

Aunque el cruce de una variedad autofloreciente con otra que no lo es, parezca una tarea sencilla, es fruto de un largo trabajo, que da como resultado variedades tan innovadoras y potentes como Syrup .

El proceso de creación de una nueva variedad autofloreciente consiste en la introducción de los genes que favorecen la floración en una línea no autofloreciente de calidad, un proceso en apariencia sencillo pero que requiere una gran dedicación. En cualquier caso, lo más destacable de este proceso es que la autofloración se comporta como un gen recesivo en la mayor parte de los casos y es fácil de determinar.

A continuación explicamos como Buddha Seeds ha desarrollado Syrup, mediante la realización de siete cruces.

1.- El proceso se inicia con el cruce de Sweet tooth, con la variedad autofloreciente seleccionada. En la primera generación tendremos plantas no autoflorecientes con particularidades mezcladas de sus dos progenitores, o dicho de otra forma, ninguna de ellas será autofloreciente pero todas tendrán el 50% de los genes de no autoflorecientes y el 50% de los genes de autoflorecientes.

2.- Realizamos un nuevo cruce. En esta segunda generación ya tendremos plantas autoflorecientes (25%), pero mantendrán características de las dos plantas originales. En este momento es fundamental realizar una minuciosa selección, en la que buscaremos aquellas plantas autoflorecientes que tienen más características de la planta no autofloreciente original para volver a cruzarlas.

3.- Con el tercer cruce, si la selección fue buena, el resultado será un 100% de plantas autoflorecientes con un 50% de características de la Sweet Tooth, con características fenotípicas de la Sweet Tooth.

4.- De entre estos individuos elegiremos un macho (o una hembra revertida, si estamos realizando el cruce con feminizadas), y lo cruzaremos con la planta no autofloreciente inicial. En esta cuarta generación obtendríamos de nuevo plantas no autoflorecientes, pero con el 75% de las características de la Sweet Tooth.

5.- Un nuevo cruce dará como resultado plantas con características mezcladas de las dos originales (autofloreciente y no autofloreciente) en un porcentaje aproximado del 75% de los genes de la Sweet Tooth.

6.- Para el sexto cruce elegiremos dos autoflorecientes y las volvemos a cruzar. El resultado es un 100% de plantas autoflorecientes con más del 75% de genes en común con la planta no autofloreciente original.

7.- Para el séptimo y último cruce elegiremos las mejores plantas de los cruces 3 y 6. Obtendremos plantas 100% autoflorecientes de la mejor calidad, que al estar separadas tres generaciones no presentarán problemas de endogamia, y se obtendrán plantas más vigorosas, resistentes y productivas.

En la nueva familia reconocemos perfectamente las características de calidad y pureza de la Sweet tooth original, pero con las ventajas de cultivo de la variedad autofloreciente. En definitiva, este proceso derivó en Syrup, una variedad con un sabor muy dulce, con trazas a jengibre y saúco, que produce un humo denso y pesado que se traduce en un potente efecto narcótico y medicinal.