Que Grasas Absorben Mejor el THC ?
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Tanto aficionados a la marihuana como científicos nos dicen que cuando extraemos THC para usarlo en la cocina, las grasas son los mejores medios para crear potentes concentrados. Pero: ¿Qué tipo de grasa deberías usar para extraer THC de la forma más eficiente?
Para averiguarlo hemos llevado a cabo un experimento comparando el potencial de cinco grasas diferentes: mantequilla, aceite de oliva, aceite de aguacate, aceite de coco y grasa de cerdo (tocino). Después de ser preparadas y fusionadas con la misma cantidad de cannabis, y de una misma manera.
Ya que los cannabinoides y las grasas son sustancias hidrofóbicas por igual, las moléculas de THC se disuelven rápidamente en los lípidos cuando se calientan juntas formando una solución. Esta relación tan amistosa continúa dentro de nuestro cuerpo.
La molécula psicodélica favorita de todos hace del tejido adiposo su lugar de residencia, y permanece ahí por un largo tiempo. Esta unión tan duradera con tu tejido graso, es la razón por la cual puedes dar positivo en una prueba antidopaje un mes después de haberte drogado.
También es la razón por la cual muchos corredores han reportado efectos psicotrópicos durante una larga carrera, pues la grasa cargada de THC se ha quemado y entrado en el sistema sanguíneo tiempo después de ser ingerido. Entre los cocineros de cannabis caseros la mantequilla es la grasa más común para realizar extracciones de THC.
Sin embargo durante los últimos años hemos encontrado (tanto en la vida real como online) un incremento en el número de cocineros aficionados que han creado una sólida preferencia por el aceite de coco. Ésto de debe a que se le atribuye un mayor potencial extractor debido a su composición química.
Evidencias anecdóticas también sugieren que las grasas saturadas como la mantequilla, la grasa del tocino, y el aceite de coco, absorben el THC mucho mejor que las grasas monoinsaturadas como el aceite de oliva y de aguacate. Pero según parece por nuestro conocimiento en materia de experimentos, éste sería el primer intento serio de probar científicamente esta hipótesis.
Cualquiera que haga infusiones o extraciones de cannabis en casa sabe bien que el proceso hará que el lugar se impregne con un olor a humedad y a hierbas malolientes; lo que podría causarte problemas con tus compañeros de cuarto, familiares o vecinos. Cualquiera de ellos puede quitarte un poco de tu infusión de THC, o incluso llamar a la policía.
Así que para este experimento hemos usado una inteligente extracción (a prueba de olores) ideada por Payton Curry (de Marijuana Recipes), un activista y chef dedicado a enseñar a las familias cómo ayudar a niños discapacitados con tratamientos a base de cannabis. El método de Curry se basa en el uso de del Nomiku (un artefacto de inmersión que genera cantidades exactas calor) para calentar el cannabis lo suficiente como para infundirlo dentro de la grasa, lo que no sólo elimina los olores, sino que permite un control de temperatura perfecto.
Este método también posibilita la habilidad de hacer varias concentraciones con diferentes tipos de grasas simultáneamente. Diseñado para la cocina “sous vide”, el termostato de inmersión calienta el agua a la temperatura deseada y la mantiene justo allí.
Es fantástico para realizar extraciones de cannabis porque los olores quedan contenidos en el envase utilizado. Ésto significa que podrás pasar el día entero haciendo tus extraciones, y los vecinos ni lo sospecharán.
Para el experimento hemos empezado con cantidades idénticas de cannabis que fueron descarboxiladas previamente a 115º durante una hora, e infundidas en cantidades iguales de cada tipo de grasa. Cada una de las cinco mezcolanzas fue sellada en su propio frasco de vidrio, y sumergidas en agua caliente a la vez.
El Nomiku fue calentando el agua hasta temperatura máxima de 180 grados centígrados, mientras los cinco envases estuvieron inmersos en agua a lo largo de cuatro horas. Posteriormente se sacaron los contenidos de los frascos, separando los restos del cannabis de las concentraciones oleosas, para ahora ya poder probar su potencia y perfil cannabinoide en un laboratorio.
Si eres de los que disfrutan experimentando con la cocina a base de cannabis, o simplemente darte un gusto cargado de THC, siempre es bueno mantener diferentes concentrados en la despensa. Aceites a base de THC pueden ser usados para hacer aderezos de ensaladas, salsas, o simplemente condimentar cualquier plato.
La mantequilla y el aceite de coco son los más fáciles ingredientes a usar en postres y comidas horneadas. Por el contrario a la grasa del tocino no se recomienda darle estos usos.
La mantequilla es uno de los medios de extración y concentración más comunes debido a su amplio uso en platos horneados y alimentos salados. Los chef especializados en cannabis favorecen la mantequilla europea por su alto contenido en grasa de leche, lo que incrementa la potencia de las infusiones, y mejora el desempeño en comparación con preparaciones a base de mantequilla común.
Mantequilla.
Para el experimento se clarificó la mantequilla para eliminar los sólidos de la leche y el agua; permitiéndole absorber el THC de una manera más eficiente. El chef Payton suele optar por el aceite de aguacate porque es antiinfamatorio, rico en vitamina E, y muy fácil de digerir.
Aceite de Aguacate.
Multitud de pacientes han reportado una gran biodisponibilidad, refiriéndose a que una misma dosis se siente más potente como consecuencia de que el cuerpo tiene mejores oportunidades de absorberla, y usarla de manera oportuna. Mientras tanto el aceite de coco se ha vuelto un popular medio para hacer extraciones y concentrados aprovechando los beneficios que brinda a la salud, y su idoneidad para se empleado por usuarios vegetarianos.
Rico en grasas saturadas y en otros muchos otros nutrientes, el aceite de coco también ayuda al organismo a asimilar las vitaminas solubles en la grasa. Una simple infusión de THC en aceite de coco no sólo puede ser digerida como comida, sino que se puede usar como aplicación tópica para calmar dolores musculares.
Además mientras que las grasas animales están compuestas por ácidos grasos complejos, el aceite de coco contiene altas cantidades de ácidos grasos simples (MCT), también conocidos como triglicéridos. Con los troglicéridos es mucho más complicado que se acumulen en forma de grasa en nuestro organismo, y por lo tanto son mucho más sencillos de quemar si los comparamos con los ácidos grasos complejos.
Si quieres bajar de peso, elegir el aceite de coco; puede acelerar tu metabolismo y reducir tu cintura. El aceite de oliva extra virgen es rico en ácidos grasos monoinsaturados, lo cual ayuda a explicar a muchas personas porqué aquellos que tienen una dieta Mediterránea poseen un riesgo menor a sufrir infartos.
Concentrando cannabis en aceite de oliva, lo hace una opción aún más saludable, ya que es una manera de agregar la cantidad correcta de THC a cualquier receta. Finamente está la grasa del cerdo (tocino), la cual no es especialmente conocida por sus saludables beneficios, sino por el sabroso gusto que le da a muchos platos.
Aeite de Oliva.
Platos que van desde ensaladas y hasta comida horneada. Cuando frías el tocino, recoge toda la grasa que expulse en un frasco y guárdala para una extración de cannabis.
La grasa resultante es excelente para bañar patatas asadas, saltear coles y repollo, o hacer deliciosas galletas de chocolate a base de tocino de arce.
Mnateca de cerdo; grasa extraida del tocino.
Para empezar el experimento comenzamos derritiendo las grasas solidas (tocino, mantequilla y aceite de coco) dentro del microondas por espacio de un minuto, para luego transferir las cinco grasas a idénticos frascos de vidrio. A cada muestra de grasa de 182 gramos, le agregamos 3,5 gramos de cannabis Jager y colocamos las tapas bien ajustadas.
Sumergimos los frascos al mismo tiempo en el agua precalentada por el Nomiku. Si no tienes un aparato de inmersión como el Nomiku puedes hervir a fuego lento los frascos dentro de una olla.
Recuerda que usando el aparato de inmersión los frascos deberían estar llenos al máximo para que se mantengan en el fondo y así conservar una temperatura consistente. Si dejamos que los frascos tengan mucho aire, flotarán y será difícil realizar la labor.
Después de dejar que los concentrados de THC hirvieran a fuego lento por cuatro horas, sacamos los frascos para que se enfriaran durante quince minutos para después quitarles las tapas. Se coló el contenido a través de una estopilla puesta encima del colador, y se exprimió para aprovechar cada gota de infusión.
Los aceites se ponen rancios más rápido de lo normal cuando se emplean en infusiones con material vegetal. Por esta razón asegúrate de guardar bien las infusiones en el frigorifico, y usarlas antes de dos meses.
La materia prima resultante fue un concentrado de cannabis con bajo contenido en THC; el tipo favorito de los cocineros expertos dado que es más asequible y de fácil dosificación. Las pruebas realizadas por “Lboratorios SC” revelaron que cada porción utilizada contenía 101 miligramos de THC por cada gramo; alrededor de 10,1%.
Con medidas adicionales de 50,2 miligramos por gramo de THCa. Esto significa que teníamos un nivel total de potencia delta-9-THC de 145 miligramos por gramos, o 14,5%.
Después de realizar la infusión con 3,5 gramos de este mismo cannabis (con 507,5 miligramos de potencial THC total) en cada tipo de grasa y probar los resultados con mucha paciencia y atención, hemos recibido múltiples resultados de dos laboratorios diferentes. El primer set de infusiones grasas fue entregado a SC Labs, donde los resultados confirmaron al aceite de oliva como el medio de mayor absorción de THC.
El chef Payton repitió el experimento y entregó los set de infusiones “Laboratorios C4”. Trás en perceptivo análisis éstos encontraron los mejores reultados en la mantequilla clarificada; seguida muy de cerca por el aceite de coco.
Es importante destcar que las pruebas de laboratorio revelan que muchas de las extraciones finales aun contenían niveles significativos de THCa (un precursor no-psicoactivo del THC) después de cuatro horas del hervido a fuego lento. Así que aumentamos el tiempo de hervido a ocho horas para saber si se podía conseguir una mayor concentración de THC.
Nos preguntábamos si las grasas saturadas necesitan un periodo más largo de tiempo para absorber la mayor cantidad de THC posible, pero los resultados de laboratorio demostraron que aumentar el tiempo de hervido sólo reducía los resultados.
Añadir otras cuatro horas a nuestra infusión tan sólo logró 0,03 miligramos más de THC por cada gramo de mantequilla clarificada. Parece haber un límite respecto a cuanto THC puede ser absorbido.
Al principio las diferencias de absorción de THC entre las distintas grasas parecían no ser tan significantes, pero al comparar las muestras nos dimos cuenta de que se puede obtener mucho más THC usando mantequilla clarificada que con otros tipos de aceites.
Según “Laboratorios C4” un gramo de mantequilla en el lote B absorbió 2,58 miligramos de THC. Comparándolos con los 2,15 miligramos del aceite de oliva.
Es sólo una diferencia de 0,43 miligramos, pero cuando lo multiplicamos por 182 gramos (una taza de grasa), te darás cuenta que el resultado final de THC varía considerablemente con las otras grasas. Una taza de infusión con mantequilla contendría 469,56 miligramos de THC; casi 78,26 miligramos más que el aceite de oliva en el lote B.
La mantequilla clarificada terminó segunda en ambas pruebas realizadas por SC Labs, mientras que el aceite de coco y la grasa de tocino se pelearon el tercer puesto. El aceite de aguacate se posicionó en el cuarto lugar, lo cual fue bastante sorprendente porque, al igual que el aceite de oliva, es una grasa mono-insaturada.
No podemos explicar porque el aceite de oliva tuvo resultados tan favorables durante las pruebas de “Laboratorios SC”, pero la información no resultó consistente según los resultados de “Laboratorios C4”. Es difícil obtener resultados consistentes de diferentes laboratorios debido a la falta de estándares uniformes y regulaciones.
Pero también existen muchas variables cuando se usa la flor del cannabis para realizar infusiones. Planeamos repetir este experimento usando aceite de hachís para descubrir cómo la tasa de absorción de THC varía según usamos material vegetal crudo, o extractos.
Necesitamos realizar más estudios al respecto pero mientras tanto, todos los que cocinan en casa pueden estar seguros de que usando mantequilla clarificada o aceite de coco en las concentraciones de cannabis, tendrán resultados más potentes y satisfactorios.
También te puede interesar: Como Preparar Mantequilla de Marihuana.
Para averiguarlo hemos llevado a cabo un experimento comparando el potencial de cinco grasas diferentes: mantequilla, aceite de oliva, aceite de aguacate, aceite de coco y grasa de cerdo (tocino). Después de ser preparadas y fusionadas con la misma cantidad de cannabis, y de una misma manera.
Ya que los cannabinoides y las grasas son sustancias hidrofóbicas por igual, las moléculas de THC se disuelven rápidamente en los lípidos cuando se calientan juntas formando una solución. Esta relación tan amistosa continúa dentro de nuestro cuerpo.
La molécula psicodélica favorita de todos hace del tejido adiposo su lugar de residencia, y permanece ahí por un largo tiempo. Esta unión tan duradera con tu tejido graso, es la razón por la cual puedes dar positivo en una prueba antidopaje un mes después de haberte drogado.
También es la razón por la cual muchos corredores han reportado efectos psicotrópicos durante una larga carrera, pues la grasa cargada de THC se ha quemado y entrado en el sistema sanguíneo tiempo después de ser ingerido. Entre los cocineros de cannabis caseros la mantequilla es la grasa más común para realizar extracciones de THC.
Sin embargo durante los últimos años hemos encontrado (tanto en la vida real como online) un incremento en el número de cocineros aficionados que han creado una sólida preferencia por el aceite de coco. Ésto de debe a que se le atribuye un mayor potencial extractor debido a su composición química.
Evidencias anecdóticas también sugieren que las grasas saturadas como la mantequilla, la grasa del tocino, y el aceite de coco, absorben el THC mucho mejor que las grasas monoinsaturadas como el aceite de oliva y de aguacate. Pero según parece por nuestro conocimiento en materia de experimentos, éste sería el primer intento serio de probar científicamente esta hipótesis.
Infusiones a Prueba de Olores
Cualquiera que haga infusiones o extraciones de cannabis en casa sabe bien que el proceso hará que el lugar se impregne con un olor a humedad y a hierbas malolientes; lo que podría causarte problemas con tus compañeros de cuarto, familiares o vecinos. Cualquiera de ellos puede quitarte un poco de tu infusión de THC, o incluso llamar a la policía.
Así que para este experimento hemos usado una inteligente extracción (a prueba de olores) ideada por Payton Curry (de Marijuana Recipes), un activista y chef dedicado a enseñar a las familias cómo ayudar a niños discapacitados con tratamientos a base de cannabis. El método de Curry se basa en el uso de del Nomiku (un artefacto de inmersión que genera cantidades exactas calor) para calentar el cannabis lo suficiente como para infundirlo dentro de la grasa, lo que no sólo elimina los olores, sino que permite un control de temperatura perfecto.
Este método también posibilita la habilidad de hacer varias concentraciones con diferentes tipos de grasas simultáneamente. Diseñado para la cocina “sous vide”, el termostato de inmersión calienta el agua a la temperatura deseada y la mantiene justo allí.
Es fantástico para realizar extraciones de cannabis porque los olores quedan contenidos en el envase utilizado. Ésto significa que podrás pasar el día entero haciendo tus extraciones, y los vecinos ni lo sospecharán.
Para el experimento hemos empezado con cantidades idénticas de cannabis que fueron descarboxiladas previamente a 115º durante una hora, e infundidas en cantidades iguales de cada tipo de grasa. Cada una de las cinco mezcolanzas fue sellada en su propio frasco de vidrio, y sumergidas en agua caliente a la vez.
El Nomiku fue calentando el agua hasta temperatura máxima de 180 grados centígrados, mientras los cinco envases estuvieron inmersos en agua a lo largo de cuatro horas. Posteriormente se sacaron los contenidos de los frascos, separando los restos del cannabis de las concentraciones oleosas, para ahora ya poder probar su potencia y perfil cannabinoide en un laboratorio.
La Despensa Ideal
Si eres de los que disfrutan experimentando con la cocina a base de cannabis, o simplemente darte un gusto cargado de THC, siempre es bueno mantener diferentes concentrados en la despensa. Aceites a base de THC pueden ser usados para hacer aderezos de ensaladas, salsas, o simplemente condimentar cualquier plato.
La mantequilla y el aceite de coco son los más fáciles ingredientes a usar en postres y comidas horneadas. Por el contrario a la grasa del tocino no se recomienda darle estos usos.
La mantequilla es uno de los medios de extración y concentración más comunes debido a su amplio uso en platos horneados y alimentos salados. Los chef especializados en cannabis favorecen la mantequilla europea por su alto contenido en grasa de leche, lo que incrementa la potencia de las infusiones, y mejora el desempeño en comparación con preparaciones a base de mantequilla común.
Mantequilla.
Para el experimento se clarificó la mantequilla para eliminar los sólidos de la leche y el agua; permitiéndole absorber el THC de una manera más eficiente. El chef Payton suele optar por el aceite de aguacate porque es antiinfamatorio, rico en vitamina E, y muy fácil de digerir.
Aceite de Aguacate.
Multitud de pacientes han reportado una gran biodisponibilidad, refiriéndose a que una misma dosis se siente más potente como consecuencia de que el cuerpo tiene mejores oportunidades de absorberla, y usarla de manera oportuna. Mientras tanto el aceite de coco se ha vuelto un popular medio para hacer extraciones y concentrados aprovechando los beneficios que brinda a la salud, y su idoneidad para se empleado por usuarios vegetarianos.
Rico en grasas saturadas y en otros muchos otros nutrientes, el aceite de coco también ayuda al organismo a asimilar las vitaminas solubles en la grasa. Una simple infusión de THC en aceite de coco no sólo puede ser digerida como comida, sino que se puede usar como aplicación tópica para calmar dolores musculares.
Además mientras que las grasas animales están compuestas por ácidos grasos complejos, el aceite de coco contiene altas cantidades de ácidos grasos simples (MCT), también conocidos como triglicéridos. Con los troglicéridos es mucho más complicado que se acumulen en forma de grasa en nuestro organismo, y por lo tanto son mucho más sencillos de quemar si los comparamos con los ácidos grasos complejos.
Si quieres bajar de peso, elegir el aceite de coco; puede acelerar tu metabolismo y reducir tu cintura. El aceite de oliva extra virgen es rico en ácidos grasos monoinsaturados, lo cual ayuda a explicar a muchas personas porqué aquellos que tienen una dieta Mediterránea poseen un riesgo menor a sufrir infartos.
Concentrando cannabis en aceite de oliva, lo hace una opción aún más saludable, ya que es una manera de agregar la cantidad correcta de THC a cualquier receta. Finamente está la grasa del cerdo (tocino), la cual no es especialmente conocida por sus saludables beneficios, sino por el sabroso gusto que le da a muchos platos.
Aeite de Oliva.
Platos que van desde ensaladas y hasta comida horneada. Cuando frías el tocino, recoge toda la grasa que expulse en un frasco y guárdala para una extración de cannabis.
La grasa resultante es excelente para bañar patatas asadas, saltear coles y repollo, o hacer deliciosas galletas de chocolate a base de tocino de arce.
Mnateca de cerdo; grasa extraida del tocino.
El Proceso
Para empezar el experimento comenzamos derritiendo las grasas solidas (tocino, mantequilla y aceite de coco) dentro del microondas por espacio de un minuto, para luego transferir las cinco grasas a idénticos frascos de vidrio. A cada muestra de grasa de 182 gramos, le agregamos 3,5 gramos de cannabis Jager y colocamos las tapas bien ajustadas.
Sumergimos los frascos al mismo tiempo en el agua precalentada por el Nomiku. Si no tienes un aparato de inmersión como el Nomiku puedes hervir a fuego lento los frascos dentro de una olla.
Recuerda que usando el aparato de inmersión los frascos deberían estar llenos al máximo para que se mantengan en el fondo y así conservar una temperatura consistente. Si dejamos que los frascos tengan mucho aire, flotarán y será difícil realizar la labor.
Después de dejar que los concentrados de THC hirvieran a fuego lento por cuatro horas, sacamos los frascos para que se enfriaran durante quince minutos para después quitarles las tapas. Se coló el contenido a través de una estopilla puesta encima del colador, y se exprimió para aprovechar cada gota de infusión.
Los aceites se ponen rancios más rápido de lo normal cuando se emplean en infusiones con material vegetal. Por esta razón asegúrate de guardar bien las infusiones en el frigorifico, y usarlas antes de dos meses.
Los Resultados
La materia prima resultante fue un concentrado de cannabis con bajo contenido en THC; el tipo favorito de los cocineros expertos dado que es más asequible y de fácil dosificación. Las pruebas realizadas por “Lboratorios SC” revelaron que cada porción utilizada contenía 101 miligramos de THC por cada gramo; alrededor de 10,1%.
Con medidas adicionales de 50,2 miligramos por gramo de THCa. Esto significa que teníamos un nivel total de potencia delta-9-THC de 145 miligramos por gramos, o 14,5%.
Después de realizar la infusión con 3,5 gramos de este mismo cannabis (con 507,5 miligramos de potencial THC total) en cada tipo de grasa y probar los resultados con mucha paciencia y atención, hemos recibido múltiples resultados de dos laboratorios diferentes. El primer set de infusiones grasas fue entregado a SC Labs, donde los resultados confirmaron al aceite de oliva como el medio de mayor absorción de THC.
El chef Payton repitió el experimento y entregó los set de infusiones “Laboratorios C4”. Trás en perceptivo análisis éstos encontraron los mejores reultados en la mantequilla clarificada; seguida muy de cerca por el aceite de coco.
Es importante destcar que las pruebas de laboratorio revelan que muchas de las extraciones finales aun contenían niveles significativos de THCa (un precursor no-psicoactivo del THC) después de cuatro horas del hervido a fuego lento. Así que aumentamos el tiempo de hervido a ocho horas para saber si se podía conseguir una mayor concentración de THC.
Nos preguntábamos si las grasas saturadas necesitan un periodo más largo de tiempo para absorber la mayor cantidad de THC posible, pero los resultados de laboratorio demostraron que aumentar el tiempo de hervido sólo reducía los resultados.
Añadir otras cuatro horas a nuestra infusión tan sólo logró 0,03 miligramos más de THC por cada gramo de mantequilla clarificada. Parece haber un límite respecto a cuanto THC puede ser absorbido.
Conclusiones
Al principio las diferencias de absorción de THC entre las distintas grasas parecían no ser tan significantes, pero al comparar las muestras nos dimos cuenta de que se puede obtener mucho más THC usando mantequilla clarificada que con otros tipos de aceites.
Según “Laboratorios C4” un gramo de mantequilla en el lote B absorbió 2,58 miligramos de THC. Comparándolos con los 2,15 miligramos del aceite de oliva.
Es sólo una diferencia de 0,43 miligramos, pero cuando lo multiplicamos por 182 gramos (una taza de grasa), te darás cuenta que el resultado final de THC varía considerablemente con las otras grasas. Una taza de infusión con mantequilla contendría 469,56 miligramos de THC; casi 78,26 miligramos más que el aceite de oliva en el lote B.
La mantequilla clarificada terminó segunda en ambas pruebas realizadas por SC Labs, mientras que el aceite de coco y la grasa de tocino se pelearon el tercer puesto. El aceite de aguacate se posicionó en el cuarto lugar, lo cual fue bastante sorprendente porque, al igual que el aceite de oliva, es una grasa mono-insaturada.
No podemos explicar porque el aceite de oliva tuvo resultados tan favorables durante las pruebas de “Laboratorios SC”, pero la información no resultó consistente según los resultados de “Laboratorios C4”. Es difícil obtener resultados consistentes de diferentes laboratorios debido a la falta de estándares uniformes y regulaciones.
Pero también existen muchas variables cuando se usa la flor del cannabis para realizar infusiones. Planeamos repetir este experimento usando aceite de hachís para descubrir cómo la tasa de absorción de THC varía según usamos material vegetal crudo, o extractos.
Necesitamos realizar más estudios al respecto pero mientras tanto, todos los que cocinan en casa pueden estar seguros de que usando mantequilla clarificada o aceite de coco en las concentraciones de cannabis, tendrán resultados más potentes y satisfactorios.
También te puede interesar: Como Preparar Mantequilla de Marihuana.
